Rubia, vestida del mismo tono de azul, zapato de salón, falda con dos volantes laterales a la altura de las caderas, cuello de escote redondo, mangas cortas levantadas, guantes de saten azul, cinta negra en el cuello y... pajarito en la mano. La Olympia de Les Contes d'Hoffmann de Munich, puesta en escena de Richard Jones y vestuario de Buki Shiff, es exactamente igual que la Cinderella/Cenicienta/Cendrillon/Cenerentola de Disney.
Es verdad!!! ¿Está todo inventado o es que ha sido un homenaje?
RépondreSupprimerEs dificil adivinar lo que pasa por la cabeza de un escenógrafo, pero yo creo que aquí intentaba dar énfasis al tema muñeca-dibujos animados, y tiene coherencia con el aire de ese primer acto. Estoy escribiendo el post (ayer me fui a dormir porque estaba cansadísima), lo publicaré hoy y espero que con lo que cuento se vea más clara la elección.
RépondreSupprimerMes petites filles agées de 5 et 6 ans auraient immédiatement reconnu Cendrillon, une princesse idéale.
RépondreSupprimerMoi je n'y avais pas pensé, je suis trop agée pour les contes de fées !!
Je viens de comprendre en lisant un interview pourquoi Hoffmann a des grosses lunettes déformantes dans l'acte d'Olympia.
Ce n'est pas pour mieux voir, non, mais pour ne pas voir qu'Olympia est une poupée !!
Bien observé !!!
RépondreSupprimerEt l'oiseau (rare...)c'est RRRRRRRolandito!!!!
Menuda memoria visual tienes!
RépondreSupprimerYo sabía que me recordaba a algo pero no he conseguido relacionarlo a qué, hasta que he visto el post.
Seré tonta! ¡No había caído en las reminiscencias a lo Disney!
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