Para mi, lo que os presento hoy es la más hermosa definición que he leído jamás sobre Rolando Villazón. A primera hora de esta mañana he encontrado este texto de Olivier Bellamy, en su Blog. Esperaba para publicar el post que estuviera ya en la web de Radio Classique el audio de la entrevista que le hizo el pasado viernes, pero aún no está disponible. Cuando eso suceda, la pondré al final de este post, para que, a parte de oirla, podáis oir también los audios elegidos por Rolando:
- Barbra Streisand : Schumann Liederkreis
- Mireille Matthieu : Paris brûle-t-il
- Queen
- Brahms : Double Concerto
- Barenboïm : Sonate n° 18 de Beethoven
- Lucia Popp : Air de Pamina (La flûte enchantée de Mozart)
El texto de Bellamy me ha parecido precioso, demostrador de una gran sensibilidad y de un excelente conocimiento de Rolando, no en vano han sido frecuentes los encuentros entre Bellamy y Villazón. Pero no es la frecuencia de estas conversaciones, sino la certera mirada y profunda conexión del autor, lo que confiere valor y veracidad al texto. Me ha gustado tanto, que lo he traducido al español, para que nadie se pierda ni una palabra, y ruego una traducción al inglés, que yo me veo incapaz de hacer con corrección, porque me lo ha solicitado una amiga alemana. ¿Alguien se anima? ¡gracias! Thank you, Joanna, for the translation!
Il ose tout. Pas n’importe quoi et pas n’importe comment. Rolando Villazon n’a peur de rien et surtout pas du regard des puristes qu’il respecte sans obéir à leurs préceptes. Il suit son chemin, ses chemins car il a de nombreux talents, avec intelligence et générosité, sans se préoccuper du qu’en dira-t-on. Il est à l’écoute d’autres artistes comme Daniel Barenboïm ou Emmanuelle Haïm, il leur fait confiance et donne tout. Il est solaire et lunaire à la fois.
Drôle, profond, unique, génial. Sans jamais donner de leçons, sans être centré sur lui-même, sans se cacher derrière un personnage, sans se protéger, il chante comme un oiseau sur la branche. Un oiseau qui connaît bien la musique, qui lit des livres, qui va au musée, qui pleure au cinéma, qui rit dans la vie. Un artiste et un homme libre. Et un artiste qui rend les autres libres. Ceux qui l’écoutent et qui l’aiment. Car c’est en discutant avec lui, un jour, que j’ai eu l’idée de mon Entretien avec Mozart. On attend avec impatience la traduction en France du livre qu’il vient d’écrire en espagnol.
Se atreve a todo. No importa qué y no importa cómo. Rolando Villazón no le tiene miedo a nada, y mucho menos a la mirada de los puristas, que él respeta sin obedecer sus preceptos. Él sigue su camino, sus caminos, ya que tiene muchos talentos, con inteligencia y generosidad, sin preocuparse de lo que la gente que decimos. Él está atento a otros artistas, como Daniel Barenboim y Emmanuelle Haïm, él confía en ellos y lo da todo. Él es solar y lunar a la vez.
Divertido, profundo, único, genial. Sin dar jamás lecciones, sin estar centrado en sí mismo, sin esconderse detrás de un personaje, sin protegerse, él canta como un pájaro en la rama. Un pájaro que conoce bien la música, que lee libros, que va al museo, que llora en el cine, que rie en la vida. Un artista y un hombre libre. Y un artista que hace que los demás libres. Aquellos que le escuchan y le aman. Fue hablando con él, un día, cuando tuve la idea de mi "Entrevista con Mozart". Esperamos con impaciendia la traducción en Francia del libro que él ha escrito en español.
He dares everything. No matter what, no matter how. Villazón fears no one and certainly not the look of the purists whom he respects without obeying their precepts. He follows his paths, his paths because he has so many talents, with intelligence and generosity, without worrying about what anyone may say. He is ready to listen to other artists such as Daniel Barenboïm or Emmanuelle Haïm, he trusts them and gives his all. He is the sun and the moon at the same time.
Funny, profound, unique, genial. Without giving lessons, without being centered on himself, without hiding himself behind a character, without protecting himself, he sings like a bird on a branch. A bird who knows music well, who reads books, who goes to museums, who weeps at the cinema, who laughs in life. An artist and a free man. And an artist who makes others free. Those who listen to him and love him. For it is in talking with him one day that I had the idea of my conversation with Mozart. We in France impatiently await the translation of the book that he has just written in Spanish.